¿Sabíais que la lengua puede darnos muchísima información sobre el estado de nuestra salud general? La forma, tamaño, textura y su color, van a ser indicativos de numerosos síntomas y aquí te vamos a hacer un resumen.
Si quieres dar un vistazo a tu salud, debes saber que es mejor revisar la lengua por la mañana, antes de que te cepilles los dientes, con luz natural. El color de la placa que se acumula en su superficie puede cambiar bajo el efecto de la comida, bebidas, medicinas o tabaquismo, así que asegúrate de que esté bien limpia.
Debes saber que el diagnóstico visual a través de la lengua no es 100% fiable y sobre todo no somos doctores que podamos ver claramente las enfermedades ni automedicarnos. La lengua se puede lastimar con alimentos agresivos, le pueden entrar bacterias y causar irritación temporal: estas no son señales de enfermedades internas.
Así que ante cualquier sospecha no dudes en acudir al especialista.
Por colores podemos observar:
ROSA CLARO: Estado natural y sano de la lengua. Saludable.
ROJO: Infecciones y procesos inflamatorios.
ROJO VIVO-INTENSO: Problemas de corazón y/o enfermedades sanguíneas.
AMARILLA: Problemas de hígado y/o estómago.
VIOLETA: Enfermedades de pulmones y corazón.
AZUL: Enfermedades de riñones.
COLOR BLANQUECINO PÁLIDO: Dieta insuficiente, falta de vitaminas.
BLANCO: Infecciones por hongos, gripe o deshidratación.
GRIS: Enfermedades del aparato digestivo.
Además de el color de la lengua, el color de la placa que se acumula encima de ella también puede ser indicativa:
CAPA BLANCA GRUESA: Hongos, intoxicación o infecciones.
COLOR CAFÉ: Problemas de pulmones.
PLACA AMARILLA: Alteraciones en el funcionamiento del tracto digestivo.
PLACA GRIS: Gastritis y/o úlceras gástricas.